Monday, September 05, 2005

Madera o carne: ¿Qué más da?

Pedazo de madera abandonado, sin hilos, sin mano que le mueva: -Mi cuerpo se ha vuelto encorvado por tratar de luchar contra el viento del olvido. La lección ha sido aprendida y querer llenar de placer el vacío vuelve al placer vano. Detesto tener este espacio entre el aire y yo; detesto admitirlo pero me haces mucha falta. El vértigo me hace hueco y mi cuerpo se dobla cuando no estás. ¿Por qué no me dijeron que querer llenar de placer el vacío también vuelve al vacío vano? Y sé que no estás, y por eso escribo y por eso me armo de valor para poder sacarlo, ni siquiera es todo, ni siquiera es algo; sé que esto es torpe poesía, así me hiciste. Ya nos hemos vuelto pesados, ahora mis manos son de otro color. Después de ese día que caí, todavía deambulas por las lágrimas que hincharon mi cuerpo y por corajes que rodearon las últimas horas de la noche hasta podrirme por completo-